Hoy en el blog os enseño mi Banana Leaf Shawl, una prenda que me ha encantado tejer y he disfrutado mucho viendo cómo crecía vuelta a vuelta junto con otras tejedoras que se quisieron unir a esta experiencia y tejerlo conmigo.

Este patrón era uno de los que llevaba tiempo en mi lista y… debo decir que la primera intentona de tejerlo me salió un poquito rana: cuando compré las madejas venía una de cada tintada, y al llegar al empalme de las dos vi, con esos sudores fríos que te recorren al ver algo así, que el cambio se notaba, y no precisamente poco. Pero después del momento “¿qué hago?“, escribí a la chica de la tienda donde las había comprado y, aunque hacía ya tiempo que las tenía en casa, me resolvió el problema y me envió dos madejas nuevas que esta vez si se convirtieron en el chal que estáis viendo. No me importa decir que la tienda fue Picknit y que Verónica (su dueña) es un encanto de persona y, ya os digo, le faltó el tiempo para resolver este contratiempo. Siempre que he hecho alguna compra allí ha sido muy amable. Desde aquí: ¡Gracias!

Como ya sabéis por el post de materiales, tejí el chal con Malabrigo Lace. Después de bloquear, y con lo finito que es, queda una especie de pañuelo muy muy suave, es una delicia tocarlo y llevarlo. Estoy enamorada de él. El color, no es exactamente como se ve en las fotos, es quizá más rosita en vez de anaranjado. Quizá la foto que más se aproxima sea la primera 😉

Desde aquí doy las gracias a todas las tejedoras que me han acompañado en este KAL. He querido alargarlo tanto tiempo (aunque en principio íbamos a terminar a finales de Enero), porque no quería que nadie se quedara con él a medias y pudiera compartirlo con todas las demás participantes. ¡Un abrazo muy fuerte a todas!¡Nos vemos en el siguiente!